Pese a no estar en un buen momento físico ni futbolístico, el uruguayo ingresó en el entretiempo, su aparición provocó que Argentinos imponga mayor presencia en ofensiva y logró marcar su primer gol con la camiseta del Bicho, que desató la euforia de todo un barrio y valió mucho más que un triunfo.

Salvo en San Juan, donde fue titular, el delantero llegado hace dos meses siempre fue al banco y no ingresaba o lo hacía por pocos minutos. Se pedía que jugara pero la realidad es que Carlos Bueno no está en aptas condiciones físicas y su nivel en los partidos y entrenamientos es bajo. No obstante, en este equipo es un hombre de jerarquía y demostró que aparece en los momentos difíciles.

Lucas Cano le ganó el puesto ante Vélez y Boca, sin embargo esta noche tuvo un mal primer tiempo y llegó el momento del ex Peñarol. Su sola presencia ya generaba una preocupación para el rival y aunque no se conectó mucho con el juego, hizo lo fundamental: estuvo donde tenía que estar y definió al gol el centro de Batallini para rubricar el 1-0. Así, se volvió a anotar de local, algo que no se daba desde la sexta fecha, ante Defensa y Justicia.

El gol de Bueno tuvo un sabor especial, ya que no sólo le dio la victoria a Argentinos, sino que fue la primera en el torneo, además fue en La Paternal, ante Boca -con lo que eso significa-, para salir del descenso y principalmente porque revivió la esperanza de que el Bicho siga siendo de Primera.