Para hablar de Diego Armando Maradona, no hace falta dar muchos argumentos. Para muchos, el mejor jugador de fútbol de todos los tiempos, el del gol a los ingleses y quien mejor representó la camiseta de la Selección Argentina. Y si profundizamos en el sentimiento del hincha de Argentinos Juniors, es el hijo que nunca se fue de casa. El orgullo y el comienzo del Semillero del Mundo. 

Pocos recuerdan, pero también hay otro hombre perteneciente al clan ‘Maradona’, que vistió la camiseta del Bicho, y ese es Hugo, el pequeño de los nueve hermanos Maradona (Lalo también fue futbolista, pero no jugó en el Bicho). El ‘Turco’ es nueve años más jóven que el Pelusa, así que cuando él debutó en 1976 con los colores de Argentinos Juniors, la condición económica de la familia comenzó a mejorar.

“Cuando Diego agarró su primera plata nos llevó a recorrer todas las jugueterías del barrio para comprarnos regalos, zapatillas, bicicletas. Quería darnos lo que no habíamos tenido de chicos”, declaraba su otro hermano Raúl a los medios décadas atrás.

Hugo era mediocampista ofensivo y debutó en el Bicho el 16 de marzo de 1986, en un partido correspondiente a la fecha 34, en el que Argentinos perdió 2-3 ( goles de Olguin y Castro) ante Boca como visitante. En dicho partido fue suplente e ingresó por Lemme. 

Jugó 19 partidos en Argentinos Juniors (en los años 1986-1987), convirtiendo un único gol, con la particularidad de que fue a Platense en Vicente López, en un 2-0 con la promisoria edad de 16 años (uno de los jugadores mas jovenes en la historia del club de La Paternal en convertir su primer gol).

Su breve experiencia con la Selección Argentina se resume al año 1985, donde fue parte, y gran figura por cierto junto a su compañero de equipo Fernando Redondo, de la selección Argentina que se coronaría en el Sudamericano Sub-16. Una vez conseguido el campeonato, con algunas modificaciones en la lista, el equipo inició en septiembre del '85 la preparación para el Mundial, que se celebró en China, a principios del '86. En la cita mundialista, Argentina perdió con Australia (0-1), empató con Alemania Federal (1-1) y superó a Congo (4-2) en la ronda inicial, aunque no pudo avanzar a cuartos de final, porque le faltó marcar un tanto más frente a los africanos.

En el Bicho jugó catorce partidos del torneo, cinco en la Libertadores y conquistó la Copa Interamericana ese mismo año. En 1987, nada menos que el Napoli de Diego adquirió su pase. Por más que uno piense lo contrario, el ‘Diez’ seguramente tuvo que ver con su fichaje. Lamentablemente para él en aquellos años, las leyes italianas solo permitían contar con dos jugadores extranjeros en cada equipo, y entre el brasileño Careca –figura en aquel momento y uno de los mejores delanteros– y el hermano del astro argentino, no se pensó mucho la decisión. Hugo, sin debutar, se fue cedido entonces al Ascoli, equipo del mismo país, en el que disputó trece encuentros –uno de ellos enfrentando a su hermano Diego– sin convertir ningún gol. Maradonino, como lo apodaban los tifosi, no pudo cumplir las expectativas puestas en él y triunfar en tierras tanas.

Por si faltaba un elogio: “Es la versión derecha de Diego”, decía Bilardo sobre él

En 1988 fue cedido al Rayo Vallecano, de la segunda división de España. La directiva del equipo de Vallecas creía en que Hugo tenía una calidad enorme por demostrar y que iba a explotar. Además, la presencia del apellido Maradona jerarquizaba a la institución y era un enorme imán publicitario. “Soy más ofensivo que mi hermano”, dejaba en claro Hugo para sumarle expectativa al asunto. El Rayo consiguió el ascenso a Primera, y el Turco contribuyó con seis tantos. La temporada en Primera fue muy mala, y el equipo madrileño volvío a la segunda división. Hugo concluyó en esos meses su vínculo con el Napoli, dueño de su pase, así que el préstamo también llegó a su fin.
Partió a Viena para defender los colores del Rapid de dicha ciudad, jugó en el Deportivo Italia, de Venezuela, y participó varias semanas en la liga uruguaya en las filas del Progreso. En 1991 fue contratado por el PJM Futures de Japón, también militó en el Avispa Fukuoka – camiseta que casualmente vistió su hermano Raúl– y en el Sapporo. En 1999 volvió a nuestro país para jugar con Brown de Arrecifes en el Nacional B, al lado de nombres como Hugo Romeo Guerra y Pepe Monje. En dicho equipo terminó colgando los botines meses después.

Su carrera como entrenador no es muy extensa. Entre 2004 y 2006 se sentó en el banco de 'Puerto Rico Islanders'. luego decidió radicarse en Florida, donde abrió la escuela Cebollitas Soccer Club para los niños.  En la actualidad está radicado en Italia, donde volvío a ser director técnico de un equipo, el Real Parete, un modesto equipo de Nápoles que milita en la 9ª división.

(Arriba, Foto El Gráfico) Campo Las Malvinas, de Argentinos Juniors. Hugo le tira un caño a Lalo cuando sale a marcarlo. El hermano mayor, Diego, sigue de cerca.

-Franco Figallo

Twitter: @FrancoFigallo