De hecho, salvo por algunas apariciones de Rinaldi en el primer tiempo, la ventaja en la pelota parada y algunos piques de Lenis cuando ya teníamos ventaja, el conjunto de Pipo casi que no mostró ningún argumento ofensivo. Además, el hecho de acumular gente en defensa no significó ser del todo sólida.

En la primera parte Argentinos tuvo las situaciones más claras del partido, aunque también hay que decir que se metió muy atrás, con una línea de cinco bien marcada, en donde Lenis generó escasa participación ofensiva, pese a que cuando lo hizo le ganó a Grillo, con Gallego, Rinaldi y Rodríguez alejados del resto y con muchos pelotazos para ellos.

No obstante, el conjunto de Gorosito tuvo la más clara en los pies de Rinaldi quien pateó solo en el área chica a la salida de un corner, quien de sobrepique la tiró encima del horizontal. De hecho, cada vez que se lo propuso, el Bicho ganó por la vía aérea pero nunca llegó a concretar lo que generó.

En la segunda etapa, Vélez arrancó mejor con dos situaciones muy claras, la primera de Villalba con un zurdazo que se fue sobre el travesaño, lo mismo que un cabezazo de Pavone. El Bicho se abusó de los pelotazos, para los delanteros, quienes jugaron casi siempre de espaldas al arco, con una muy baja participación de Gallego y algunos avances desordenados de Zapata.

Para colmo, después de la expulsión de Franco Flores por un forcejeo con Asad, Pipo agotó los cambios, ya había puesto a Castillejos y Alanis por los delanteros titulares, reforzando la defensa con Alvarez en lugar de Gallego, por lo que el arco rival quedaba cada vez más lejos, al igual que para Vélez, que cada vez que atacaba luchaba contra todas sus limitaciones y no inquietaba a Ojeda.

Hasta que a cuatro minutos de que termine el encuentro, Castillejos encaró para el área y cuando se disponía a definir, Amor lo tomó de la camiseta dentro del rectángulo final y el árbitro sin vacilar cobro penal, que Alvarez cambió por gol con un disparo suave a la izquierda de Aguerre, quien fue hacia el otro lado.

El resto del tiempo constó solamente en aguantar algunos centros que no llegaron a destino y en no poder definir algunas contras en los pies de Lenis, quien cada vez que encaró le ganó como quiso a Grillo, pero como casi siempre le faltó esos cinco centavos para el peso para definir la jugada de manera correcta y liquidar el pleito.

Un partido sin demasiadas luces para Argentinos, que se llevó una victoria muy importante ante un rival que muchos definen como clásico, pero que hoy tenía muchos pibes en cancha y no pudieron bancar la parada ante la mirada de sus inquietos hinchas. El Bicho ganó después de tres partidos, se acomodó nuevamente en el centro de la tabla y sumó de a tres, que sin dudas es el objetivo más importante. Ahora, ¿debemos conformarnos con que sea el único?