Pasión Paternal

Mereció mucho más que un empate


16 de marzo de 2015

Pasión Paternal - @pasionpaternal

En un partido en el que Estudiantes ganaba 2-0 gracias a su efectividad, Argentinos jugó un gran segundo tiempo, llegó a la igualdad a través de Franzoia y Garré y podría haberlo ganado. Buena producción del Bicho, que continúa invicto en el torneo.


Cuesta explicar cómo hizo Estudiantes para ponerse 2-0 en el partido y solamente desde esa desventaja se puede comprender cómo no lo ganó Argentinos, en realidad, cuando hizo méritos más que suficientes como para quedarse con los tres puntos. Tal vez desde la efectividad casi perfecta que mostró el equipo de Pellegrino se podría llegar a explicar por qué se le hizo todo tan cuesta arriba al Bicho.

Argentinos jugó como suele jugar un equipo de Gorosito en La Paternal. Bien adelantado en el campo rival, presionando en toda la cancha y con una clara intención de tener más la pelota y generar peligro en el arco rival. Lo que sucedió esta vez es que la mano vino torcida de arranque. A los 7 minutos, penal de Garré, gol de Mendoza y 0-1. Todo el primer tiempo el equipo buscó, quizás sin tanta claridad pero sí con mucha insistencia, el gol del empate que nunca llegó. 

Las más claras estuvieron con un remate de Gallego, que siempre intenta de media distancia, y la mejor de todas fue la que tuvo Lenis, en el final de esa etapa, cuando de cabeza increíblemente se lo perdió entrando a la carrera en diagonal. Para colmo, el segundo tiempo empezó con otro gol de Estudiantes. Auzqui, de cabeza, sorprendió a los dos minutos y le daba al partido un rumbo que no parecía irreversible, pero que si se ponía realmente complicado si Argentinos no descontaba pronto. Y eso fue lo que ocurrió: a los 8 minutos, Franzoia anticipó con la punta del botín y aprovechando las dudas de Domínguez y Rosales, definió ante Silva. La historia ya estaba 1-2. 

A partir de allí, el equipo de Gorosito lo acorraló al Pincha. Literalmente. Lo obligó a jugar desde ese momento hasta el final del partido agolpado contra su arquero. Argentinos desbordaba por todos lados y la sensación de que estaba al caer el segundo gol del Bicho la percibían hasta los jugadores de Estudiantes. Llegó tal vez de la manera menos esperada, aunque a decir verdad para ser justos ya había amagado con algo así el partido pasado, contra Defensa y Justicia. Garré entró como una locomotora en diagonal sobre la izquierda, definió con potencia y precisión y a los 33 puso el 2-2 que sería definitivo. 

Terminó siendo injusto el resultado final porque de los dos no cabe ninguna duda que el mejor fue Argentinos. Estudiantes se vio beneficiado por la circunstancia de estar arriba 2-0 en el marcador y se dedicó a cuidar la diferencia. El Bicho tuvo al menos un premio por no haber bajado nunca los brazos y salvó su invicto en el torneo. Más allá del punto, volvió a dar señales de que tiene todo dado como para hacer una buena campaña. Y esa buena imagen que dejó fue aún más importante que el empate.

Foto: Juan Albornoz, de Estudio William Barbosa

Compartir esta nota en