Argentinos volvió a sufrir la intensidad de una defensa férrea en el Nacional B. Independiente Rivadavia de Mendoza le propuso el juego de roce y logró su cometido de anular al líder del certamen. 
"Es fútbol esto. El contagio de ellos nos lleva a salir de partido. Capaz que esa era la idea de ellos, sacarnos de partido porque de otra manera no nos podían ganar", supuso Damián Batallini, y admitió: "nos metimos en el juego de ellos y no nos llevamos nada, pero hay que levantar la cabeza porque sabemos que la otra semana tenemos otra final". 

De todos modos, el extremo del Bicho parecía saber qué complicaciones podía traer el equipo de Berti. "Sabíamos que era un partido jodido en la cancha de ellos. De entrada no supimos llevarlo bien. Eso nos costó los dos goles que después nos costó revertir", dijo el autor del único tanto. "Obviamente que duele porque a nadie le gusta perder, pero bueno hay que levantar la cabeza y seguir", afirmó con esperanza Batallini, "no queda otra".

A nivel personal, el fruto del semillero sumó su segundo encuentro como titular y, además, su segundo gol en estos dos partidos. Sin embargo, este buen pasar no parece concernirle más que el pasar del equipo: "me pondría feliz si ganáramos. Esto no me sirve ni a mí ni al equipo, así que mientras ganemos no importa quién haga el gol. Yo traté de hacer el gol y ver si podíamos empatar, pero no nos llevamos nada".

En el cierre de su declaración post partido, Batallini informó que el golpe por el cual debió ser sustituido, fue efectivamente un "esguince de hombro", que según él, "no es nada grave" y de esta forma estaría disponible para el partido del sábado.

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