"Sensación positiva"
02 de febrero de 2017
Federico Lanzillotta valoró la actuación del Bicho ante Tigre, se refirió a la “sorpresiva” salida de su compañero Trípodi a Chacarita y contó qué se siente ser el más grande de los arqueros del plantel.

Titular en el primer tiempo de 45 minutos, que resultó 0-0, del amistoso de este miércoles con Tigre, Federico Lanzillotta charló con Pasión Paternal tras los encuentros ante el equipo de Pedro Troglio. “Son partidos que suman. Tigre es un rival de jerarquía y haberle jugado de igual a igual nos deja una sensación positiva. Se está trabajando de una gran manera, es este el camino”, analizó el uno.
Argentinos Juniors fue competente y estuvo a la altura de un equipo de Primera. Y sin dejar de lado sus ideales futbolísticas, los que trajo consigo e implementó Gabriel Heinze en sus dirigidos. “La salida del fondo es nuestra manera de jugar. Haberla implementada ante un equipo de Primera es muy bueno. Tigre presiona muy bien, y sin embargo pudimos superarlo con juego y movimientos”, comentó Lanzillotta.
Pensando en la recta final de la B Nacional que se aproxima, según el ex Chicago, la “etapa más dura donde más concentrados hay que estar”, el Bicho no tiene un 11 definido o, al menos, no lo ha enseñado en los partidos de verano. “Todos los chicos están en un nivel alto. El que entra, puede jugar tranquilamente. Por eso el DT opta en armar equipos mixtos. A nosotros nos sirve para conocernos mejor”.
Sobre la ida de Emanuel Trípodi a Chacarita, Lanzillotta opinó con absoluta sinceridad: “Fue sorpresivo, no lo esperábamos. Fue de un día para otro. Me enteré en el vestuario que Ema se iba. Debe tener sus motivos, hay que respetarlos y le deseo lo mejor del mundo, que sea feliz en Chaca. Es un tipazo”. Respecto a otra salida, la del entrenador de arqueros Marcelo Villasanti y la llegada de Walter De Lemos, el uno indicó que “se trabaja igual”.
Ahora, a pesar de sus jóvenes 24 años, Lanzi se convirtió en el arquero más veterano del plantel, ya que trabaja con Lucas Cháves, de 21, y Leandro Finochietto, de 19. “Me están saliendo canas y todo, jaja. Nos llevamos muy bien con los chicos. Todos los días entrenamos con una sonrisa”, bromeó.