Si bien falta más de una semana para el partido con Rosario Central, Pasión Paternal habló con Pablo Álvarez, actual jugador del "Canalla" quien palpitó lo que será el duelo frente a Argentinos, y pese a los momentos diferentes que atraviesan ambos clubes, asegura que no será nada fácil vencerlo. Además, confesó ser hincha fanático del "Bicho" y hasta se animó a vaticinar un regreso al club, luego de haber realizado todas las infantiles: "Es una cuenta pendiente".

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Sorprendió a propios y extraños. Poca gente relacionaba el nombre de Pablo Álvarez, aquel jugador que fue campeón con Boca y Estudiantes, y que ahora es una de las figuras de este sorprendente Central, con el mundo Argentinos. ¿Qué tienen que ver? Y es que el oriundo de zona norte, es un confeso hincha de Argentinos desde muy pequeño: "Toda la gente sabe que soy hincha de Argentinos. He hecho todas las infantiles ahí y parte de las inferiores hasta la octava división. Es una cuenta pendiente que tengo conmigo mismo regresar". Asimismo, no sólo los colores le tiran, sino que la forma de jugar también le atrae: "Argentinos siempre fue una debilidad. Me gusta su juego, la delantera que tiene es interesante. Más allá de eso, mi cabeza está puesta en Central y en tratar de hacer las cosas bien", expresó.

Siguiendo con el análisis de lo que será el duelo entre Bichos y Canallas, Álvarez no se confía, más allá de la diferencia de puntos que existe entre un equipo y otro y la jerarquía de jugadores: "A nosotros nos quedan tres finales y las vamos a jugar a muerte. Ahora se viene Argentinos, un rival que hay que respetarlo, tener cuidado, vienen en alza. Tienen jugadores muy desequilibrantes de mitad de cancha en adelante. Repito: es una final y la tomamos con la seriedad que corresponde".

El contrato de Pablo Álvarez finaliza en diciembre de este año, y ante la urgencia de Argentinos por un lateral derecho, el lateral de 30 años no quiso ilusionar a la gente, pero volvió a remarcar que jugar en La Paternal sería un sueño: "Es una promesa que me la he hecho a mí mismo y a mi familia. Nunca se sabe cuando, pero es una deuda que tengo. Llegué a los 8 años. Hice hasta la octava y después me fui a Boca. Estuve muchos años en Europa y volví recién ahora. Fueron siete años afuera. Central cumplía con todos mis requisitos para volver al fútbol argentino y acá estoy. Tengo contrato hasta diciembre de este año. Es complicado, vamos a ver que pasa, pero es una cuenta pendiente que voy a saldar", cerró.