Aceptable debut
06 de febrero de 2016
En la presentación de Argentinos versión 2016, el Bicho arrancó sumando de a un punto tras el 1-1 ante Tigre en La Paternal. El equipo de Carlos Mayor empezó perdiendo tras un grosero error en el fondo pero logró empatarlo en el segundo tiempo de la mano de Luciano Cabral, fundamental en la levantada futbolistica. El Bicho mostró cosas interesantes en la mitad de cancha aunque le costó en los últimos metros y dejó algunas dudas en el fondo, donde Camilo Vargas apareció para responder.

Con algunos momentos interesantes y otros preocupantes, Argentinos aprobó en el arranque del campeonato y terminó sumando un punto en un partido que por momentos parecía estar perdido. Fue 1-1 en el re-estreno de Carlos Mayor en el banco de suplentes del Bicho ante un Tigre que se dedicó más a agruparse atrás que atacar, pero que así y todo supo tener las mejores situaciones de gol.
Argentinos empezó siendo muy superior en los primeros minutos, a través de la tenencia de la pelota en campo rival pero le costaba ser profundo. Era interesante el manejo entre el Lobo Ledesma e Insúa más el vértigo que le metían Barboza y Rodríguez por las bandas, pero el equipo no lograba acertar en los metros finales. Sin embargo, de un pelotazo de un saque de arco, la pelota picó, Batallini falló en el cierre y a Correa -que entraba solo por el medio- le sirvieron el 1-0.
Si con el empate los de Victoria estaban cautos esperando en su campo, con el triunfo parcial esta postura se marcó todavía más. Y eso le costó mucho a Argentinos, porque ya no era tan preciso como en los primeros minutos, no encontraba profundidad por las bandas y a Zelaya no le llegaba la pelota. Encima, el Matador casi amplía la ventaja tras un córner en el que Camilo Vargas demostró todos sus reflejos para la segunda atajada del partido, sumando a la del minuto de juego. Había algo que no funcionaba y Mayor lo sabía.
Para el inicio del complemento, el entrenador optó desde el minuto 0 por Lautaro Rinaldi para tener más opciones en ataque pero rápidamente realizó la segunda variante que fue la que realmente cambió la cuestión. El ingreso de Luciano Cabral aportó pierna y mente fresca en tres cuartos de cancha. Pasando el primer cuarto de hora, lo tuvo el juvenil pero nunca se decidió a patear, y en el rebote el cabezazo de Zelaya se fue por encima del travesaño. De a poco, Argentinos empezaba a inclinar la cancha pero eso le costaba: quedó mal parado en un par de ocasiones y lo pudo haber sufrido.
Sin embargo, a los 26 cortó Guille Benítez pasando la mitad de la cancha, Rodríguez tocó para Insúa, quien de primera tocó al medio y encontró a Cabral, libre de marca por el movimiento de Rinaldi que se había llevado al hombre de Tigre. El enganche que ahora viste la #14 volvió a tomarse su tiempo dentro del área, pero esta vez esperó a que le saliera Javier García para tocarla sutilmente y meterla en el ángulo para el 1-1, que a decir verdad era merecido. Y se la jugó mayor, poniendo a Lucas Cano para ir con todo en busca del triunfo, pero la realidad es que casi lo pierde de no ser por Batallini, que en la línea salvó el empate, cuando Vargas ya estaba vencido.
Terminó siendo justo el empate, y el partido dejó buenos augurios para el futuro. La realidad es que entre juveniles y refuerzos, el equipo tenía muchos debutantes pero así y todo se pudo empezar a ver qué es lo que busca Mayor, que no dudó nunca en ir a buscar el triunfo. Todavía hay mucho por corregir y trabajar, y además Rinaldi y Cabral le demostraron al DT que están para ser titulares también. La próxima parada es en Mar del Plata ante el sólido Aldosivi. Argentinos deberá ir a revalidar por qué el punto de local puede ser positivo.
FOTO: Leonardo Robles, de Estudio William Barbosa